At. Paciente
At. Clínica
Para poder realizar un tratamiento de fertilidad existen dos opciones: acudir a una clínica privada, o por el contrario, acceder a través de la Seguridad Social. Las dos opciones tienen sus pros y sus contras y cada mujer o pareja tiene que decidir dónde quiere realizarse el tratamiento valorando criterios como el tiempo y el precio:
Someterse a un tratamiento de fertilidad (ya sea una inseminación artificial o Fecundación in Vitro / FIV) es una decisión muy importante, ya se trate de mujeres que lo quieran hacer solas o con sus parejas, sin duda es una de las decisiones más importantes de sus vidas.
Son muchas las técnicas de reproducción asistida que disponemos en nuestras clínicas de fertilidad en Madrid para ayudar a nuestras pacientes a superar sus problemas de fertilidad. Nuestros más de 20 años de experiencia en el campo de la reproducción asistida y las vivencias de nuestro equipo de ginecólogas nos permite afirmar que una de las técnicas más utilizadas y a la vez más efectivas es la fecundación in vitro.
El proceso antiguamente habitual de "casarse, vivir juntos y tener hijos" ya no es siempre en este orden ni es visto como una obligación entre las personas de esta nueva sociedad en la que vivimos. Una sociedad en la que los roles de las parejas y los modelos de familia han evolucionado. Hoy en día y cada vez más, existen parejas que no están legalmente casadas, pero que forman sus familias y viven como si lo estuvieran.
Los problemas de infertilidad son hoy frecuentes en parejas de todo el mundo, hecho que ha incrementado el llamado turismo reproductivo. Es un tipo de turismo médico o de salud que consiste en desplazarse a un país extranjero para llevar a cabo un tratamiento de reproducción asistida, entre los que destacan la fecundación in vitro, la inseminación artificial y la gestación subrogada.
Por increíble que pueda parecer, la respuesta es que sí: volver a ser madre tras una ligadura de trompas es posible y además, muy exitoso con Easyfiv. En España, más de 600.000 mujeres se han sometido a una ligadura de trompas para no volver a quedarse embarazadas. Pero, a veces, el deseo incontrolable de volver a hacer un sueño realidad, puede cambiar una decisión que en un momento pareció irrefutable.
